“Aprender a vivir” de José Antonio Marina
El libro trata de cómo vivir bien, qué es vivir bien, la personalidad como meta, el buen uso de los recursos personales, cuáles son los recursos fundamentales (equilibrio afectivo, temple, sabiduría, fortaleza, diligencia, alegría, sociabilidad, respeto, compasión…), los hábitos afectivos (el carácter, la motivación, los sentimientos), cognitivos (la inteligencia triunfante, la fracasada, el buen uso de la inteligencia, el uso creador de la misma) y operativos (inteligencia ejecutiva, autorregulación, los recursos morales), y por último, la personalidad elegida que en definitiva es la meta.En cierto modo, cada uno de nosotros somos responsables de nuestra propia educación y esta idea de que uno se puede auto-educar es un concepto que deberíamos transmitir a los universitarios.
Este libro sienta los pilares necesarios que les pueden servir de guía para lograr una vida buena.
Se puede obtener en la Casa del Libro
“La madurez. Dar a las cosas la importancia que tienen” de Miguel Angel Martí García
Es un libro muy cortito (122 pgs), con dos partes bien definidas: dimensión intra-personal y dimensión relacional de la madurez. Consta de capítulos breves y claramente separados; por ejemplo, la autocrítica, la prudencia, la reeducación, la paciencia, los enfados, la independencia, la afectividad, la mala educación, y un largo etc. El autor es un catedrático de filosofía. Su propuesta, desarrollada en varios libros, es “la analítica existencial en torno a la autenticidad del hombre”. Lo que me parece interesante es sembrar el concepto de madurez en los jóvenes como una meta deseable en la vida.
Se puede obtener en la Casa del Libro
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